– Juan Luis, ¿y tú que opinas de todo esto que se lee por ahí de que los chinos nos espían con sus tecnologías? – le pregunté el otro día a mi sobrino informático.
– ¿A ti quién te cae mejor, Estados Unidos, China, Rusia o Europa?
– Hombre, yo vivo en Europa, así que por cercanía diría que Europa.
– Bueno, entonces ¿tu prefieres que espíe Europa a que te espíe China?
– Hombre prefiero que no me espíe nadie.
– La máquina para viajar al pasado no se va a inventar nunca. Si no tendríamos turistas temporales que vendrían a ver cuán estupidos somos. Aunque a lo mejor esos grupos de turistas que se ven en las ciudades…
– Eeeeeeeh… que te vas por las ramas – tuve que cortarle.
– A lo que iba, que te espíen o no es cosa de ellos, pero ser capaces de espiarte, la tienen todos. Los americanos quieren ser los únicos que espían y les dan caña a todos para que usen sus tecnologías y así poder espiar tan agusto. Sus máquinas y programas están por todo el mundo así que tiene casi todo el trabajo hecho.
– Ya veo, ¿y los chinos?
– Los chinos ya les dieron un frenazo a los americanos hace años prohibiendo Google y Facebook y no sé cómo andan con Windows ahora. Pidieron tener acceso a las tripas informáticas de ambas y las empresas se negaron. Así que les cortaron las alas. Sus máquinas son baratas y cada vez mejores, así que los americanos no quieren perder el espíopolio.
– ¿Pero quieres decir que Google y Facebook espían para el Gobierno americano?
– No digo que lo hagan, digo que pueden hacerlo. Es sospechoso que el Gobierno gringo las defienda tanto en todos los lados. Uno podría pensar que en lugar de ser empresas independientes y privadas son propiedad del Gobierno yanqui.
– Bueno, no hay que ser mal pensado. Seguro que todo este espionaje, si lo hay, que lo dudo, lo hacen por el bien de la humanidad en general.
– Sí, seguro.
Segurísimo